Cuidados básicos para tu Bull Terrier Miniatura: las uñas

Los cuatro pilares básicos de los cuidados constantes de tu Mini Bull Terrier son las uñas, las almohadillas, las orejas y el pelo; y para que estos cuatro pilares se conviertan en una normalidad, y lleguen a  formar parte de tu rutina, los cuidados para tu Mini Bull Terrier han de ser muy constantes y sobre todo, has de manipularle muy a menudo, para que no le suponga un trauma, sobre todo el hecho de cortarle las uñas, por ejemplo.

Las uñas del Mini Bull Terrier, aunque no lo parezca, son muy delicadas y debemos prestarle especial atención para evitar una mala herida o un posible enquistamiento, pudiéndose llegar a producir problemas para andar.

Aunque las garras se suelen limar de manera natural con sus caminatas diarias, en ocasiones pueden crecer de manera más rápida de lo deseado, haciendo que sea necesario una pequeña ayuda extra por nuestra parte. Por este motivo es recomendable revisarlas periódicamente, desde el momento que se adquiere la responsabilidad de tener un Mini Bull Terrier.

Lo primero es detectar que efectivamente no existe el mismo desgaste en las uñas. Esto lo podemos ver de dos formas: por la vista y por el tacto. Las uñas son como alfileres, de hecho, si te tocan con esas garras, te podrás llevar más de un rasguño.

A la hora de cortar las uñas, debemos cortar únicamente la parte más blanca. Hay que tener especial cuidado en no cortar demasiado porque podemos dañar algún nervio, pasando de evitar un problema estético a tener mucho mayor por una mala cojera.   

Una de las maneras más sencillas que tenemos de hacer este trabajo cuando son cachorros, según nuestra experiencia, es utilizar unas tijeras adecuadas junto con una lima de uñas, que además nos será de gran utilidad para finalizar el trabajo con un buen limado.

Cuando sean más adultos, utilizamos un dremel. Una vez cogida la costumbre, el resultado es siempre mucho más perfecto y rápido que con tijeras y lima.

Por último, no olvides nunca premiar a tu Mini Bull Terrier con alguna golosina o juguete después del cortado y lima de uñas. Con ese gesto tan sencillo conseguirás que lo asocie a un ámbito positivo y te sea mucho más sencillo en las siguientes ocasiones.

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